Nativos digitales
El concepto describe el cambio generacional en
el que las personas son definidas por la cultura tecnológica con la que están
familiarizadas. En ningún
momento de la historia la tecnología se ha movido tan rápido como ahora. Hoy en
día los nuevos gadgets de alta tecnología pueden ser cosa del pasado
incluso antes de llegar a las tiendas. En el ámbito de la educación ha
repercutido con gran impacto pero con mal manejo por parte de los docentes y
nos atrevemos a afirmar que están satanizadas las tecnologías educativas, por
la resistencia que ha puesto el docente a no salir de sus viejos hábitos de
enseñanza y modificarlos por uno más eficiente, rápido y diferente. Los estudiantes
de hoy están íntimamente ligados a las últimas tecnologías y conocimientos a través
de la web, manejan las funciones que le da la tecnología como si se
tratara de un juego para ellos.
La importancia
de la TIC, aparentemente es más reconocible por los nativos ya que hacen mayor
uso de ella, se explica aquí la importancia de mantenerse al día con la
tecnología y las ventajas que podríamos obtener de ellas.
La “pérdida de control”, cuando no hay un conocimiento real de uso eficiente
de las TIC, puede llegar a convertirse en un enemigo del docente más que un
aliado para fortalecer los procesos de enseñanza aprendizaje; salones de clases
con discentes que poseen acceso a todo tipo información. Dominan herramientas
tecnológicas con mayor fluidez que lo haría un experto, sin temor al error,
investigan, de manera autónoma, trabajan de manera impresionante por ende
comparten pruebas, trabajos, ensayos, todo lo que pueda aportar a la comunidad.
Qué papel jugamos los docentes
Estamos llamados a guiar los procesos, facilitar las herramientas que
den a traste con mejor enseñanza, o sea que el papel fundamental del maestro
tradicional ha ido cediendo terrenos a los nuevos paradigmas donde el
estudiante es el actor principal del sistema, es por esto que el maestro debe
actuar ya no de la forma tradicional que por décadas creímos correcta, sino
como un facilitador del aprendizaje.
¿Entonces qué hacer?
Convertirnos en lideres para guiar a los dicentes, perder el miedo,
generar un espacio de mutuo conocimiento, donde el alumno sea que determine con
quiere aprender utilñizadno herramientas dinámicas como un blog, una plataforma digital o una red
social, donde podamos generar una sinergia positiva de crecimiento compartido,
posibilitar un espacio digital de mutua convergencia, donde nazca una nueva
autoridad, validada en la comunidad.